Justicia, Paz, Integridad<br /> de la Creación
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Aprender de las otras Iglesias

Butembo 25.07.2023 A cura di Jpic-jp.org Traducido por: Jpic-jp.org

Ya San Pablo decía: “Hay diferentes tipos de dones espirituales, pero es el mismo Espíritu que los da. Hay diferentes maneras de servir, pero es al mismo Señor a quien servimos. Hay diferentes maneras de hacer las cosas, pero es el mismo Dios quien obra todo en todos. En cada persona el Espíritu Santo se manifiesta como un don para el bien de todos” (1 Co 12, 4-7).

El Papa Francisco pide a las Iglesias locales que incluyan a todos los niveles a las otras Iglesias en sus preparativos para el Sínodo Mundial. En su historia, a menudo estas Iglesias han preservado el carácter sinodal de la Iglesia mejor que la Iglesia católica, que ha insistido sobre todo en las estructuras jerárquicas. Podemos aprender mucho de sus puntos fuertes y también de sus debilidades.

1-. En las Iglesias ortodoxas, la práctica sinodal ha continuado de acuerdo con la tradición de los Padres y sigue viva hoy en día, por ejemplo, mediante la práctica de un sínodo permanente para aclarar cuestiones litúrgicas, jurídicas y prácticas. Un punto débil de la Ortodoxia es el estrecho vínculo entre la Iglesia y el Estado, que ejerce una influencia en la vida de la Iglesia.

2-. En la Comunión Anglicana, la práctica sinodal sigue siendo una realidad a todos los niveles: local, nacional y supranacional. Crea una sinergia entre la autoridad legislativa de los sínodos, en la que participan todos los miembros del Pueblo de Dios, y el poder ejecutivo de los obispos.

3-. Uno de los detonantes de la Reforma fue el abuso de autoridad en la Iglesia. En su momento, fue la venta de indulgencias y la corrupción del clero; hoy es el abuso sexual. Los reformadores insistieron con razón en el sacerdocio universal de todos los bautizados y en la responsabilidad de los laicos en la toma de decisiones. Pero la ausencia de una autoridad definitiva y el énfasis unilateral en la libertad cristiana han conducido a la fragmentación del protestantismo.

4-. La rápida expansión de las iglesias carismáticas, sobre todo en los países del Sur, demuestra que la pastoral de las Iglesias tradicionales ya no responde a las necesidades religiosas de muchos cristianos. Lo que atrae especialmente a los jóvenes es una forma de culto en el lenguaje y la música de la cultura actual, la experiencia de una comunidad viva y la libertad para que los individuos aporten sus carismas.

La sinodalidad de la Iglesia y "el principio de la igual importancia de los dones jerárquicos y carismáticos en la Iglesia" fueron redescubiertos en el Concilio Vaticano II y anclados en nuevas estructuras pastorales a todos los niveles: sínodos episcopales regulares, conferencias episcopales nacionales y regionales, consejos pastorales diocesanos y parroquiales. El proceso sinodal tiene varios objetivos:

- Infundir un espíritu misionero en estos procesos ya existentes, para que no se ocupen únicamente de cuestiones internas de la Iglesia, sino que se sepan responsables en primer lugar de la misión de la Iglesia en el mundo.

- Implicar a los laicos en la toma de decisiones no sólo como asesores, sino también como corresponsables.

- No ver la toma de decisiones como una disputa entre opiniones diferentes, sino como una búsqueda común de la voluntad de Dios para nosotros hoy.

Un proverbio africano Ba alu pamvu siri ru (Lugbara - Uganda) dice: "La huella de una sola persona es muy débil".

La Propuesta de un Decálogo

Así pues, Bruno Forte, teólogo, arzobispo de Chieti-Vasto (Italia), ofrece para un verdadero Sínodo: La propuesta de un decálogo -The Proposal of a Decalogue-. Si 'diálogo' significa 'encuentro a través de la palabra' (dia-logos), el diálogo es necesario para caminar juntos, para vivir ese estilo de 'sinodalidad' (sínodo significa un camino hecho juntos), con el que el Papa Francisco está llamando a la Iglesia a afrontar los desafíos y las promesas de nuestro tiempo.

Para vivir un auténtico proceso sinodal, la Iglesia debe ser cada vez más un pueblo en diálogo, en sí misma y con los demás. El camino de la sinodalidad nos pide a todos verificarnos en la capacidad de dialogar en la verdad. Es una invitación  a hacerlo examinándonos sobre este decálogo, que elaboré hace varios años y puse a prueba en muchas ocasiones para educarnos en el diálogo.

1-. No hay diálogo sin humildad. Aceptando escuchar al otro, renunciando a toda pretensión sobre él, se abre el camino a la verdad, a la que todos debemos obediencia.

2-. No hay diálogo sin escucha. Es necesario acallar prejuicios y temores, abrirse a lo nuevo, respetuosos de la extranjería del otro, acogiéndolo con confianza como un huésped interior, deseosos de vivir la pertenencia común a la verdad y al amor que salva.

3-. No hay diálogo sin asombro. Asombrarse, ver el mundo con otros ojos, sentirse parte y no el todo, implicarse y arriesgarse, desorienta, pero libera de falsas resistencias y hace capaz de acoger la verdad venga de donde venga.

4-. No hay diálogo sin un lenguaje común. Para entender las palabras de los demás, hay que escuchar sus corazones y respetar la situación vital de la que proceden. Sólo así el diálogo puede ser un ‘encuentro en la palabra’ (dia-logos).

5- No hay diálogo sin silencio. El silencio es necesario tanto para escuchar y reflexionar sobre lo que nos propone el otro, como para expresar una auténtica cercanía, a menudo transmitida por gestos más que por muchas palabras. ¡No diremos palabras verdaderas si antes no hemos recorrido durante mucho tiempo los caminos del silencio!

6-. No hay diálogo sin libertad. Para abrirse al diálogo y vivirlo, hay que ser libres de uno mismo, dispuestos a cuestionarse; libres de los demás, rechazando los condicionamientos y miedos que a veces nos imponen; y libres para obedecer sólo a la verdad, que nos hace libres (cf. Jn 8,32).

7-. No hay diálogo sin perdón mutuo. Quien quiera dialogar debe limpiar su mente y su corazón de cualquier resentimiento o herida de agravios sufridos. Haciendo memoria, el corazón debe purificarse con la petición y el ofrecimiento del perdón.

8-. No hay diálogo sin conocimiento mutuo. El desconocimiento del otro, de su cultura, de su mundo vital, está a la base de los malentendidos y de las cerrazones. Para dialogar es necesario conocer al otro y ser conocido por él.

9-. No hay diálogo sin responsabilidad. Quien dialoga nunca debe olvidar la red de relaciones humanas de la que procede y ante la que es responsable. El diálogo no elimina, sino que aumenta, el sentido de responsabilidad que cada uno debe tener hacia el bien de todos.

10-. No hay diálogo sin verdad. Quien no tenga pasión por la verdad no podrá dialogar. En el diálogo el corazón se abre a quien es la verdad, el Dios vivo, que viene a habitar en quien -en diálogo con él- acoge Su amor por él.

Por eso, el diálogo exige humildad, escucha, capacidad de asombro, comprensión, silencio, libertad de sí mismo, de los demás y de las cosas, reciprocidad en el perdón y en el conocimiento recíproco, responsabilidad en el querer el bien y obediencia a la verdad.

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Los comentarios de nuestros lectores (3)

Bernard Farine 23.08.2023 J'aime bien ce décalogue qui est ouvert mais sans concessions. Il pourrait servir, en l'adaptant, à beaucoup de situations de dialogue. L’article souligne les faiblesses de l'église orthodoxe (proximité avec la pouvoir politique), des églises protestantes (morcellement) mais il ne souligne pas les faiblesses de certains mouvements charismatique (pas tous) alors que j'en vois beaucoup. En particulier une certaine fermeture sur la vie civile et un risque sectaire important impliquant parfois des risques d'agressions sexuelles par les responsables de ces groupes (par exemple L'Arche de Jean Vannier en France).
Dario 02.09.2023 Forse l articolo dovrebbe andare ai cardinali a vescovi a preti locali (usa in particolare)..Chissa Gesu cosa direbbe oggi? Rivolterebbe i tavoli nella "sinagoga/chiesa/" ..Mi sa forse andrebbe oltre.. il" capitalismo "della Chiesa Cattolica ovvero Vaticano ed i suoi grazie a Dio pregi e tesori, ringraziamolo,,dovrebbe avere una funziona potente..universale..dovrebbe avere preti studenti in economia, macro economia, lavoro, scienza.. etc..meglio una societa in sviluppo che comprende il movimento dei preti operai bellissimo, forse era troppo ambiguo per alcuni allora, non andava bene..li vedi il cuore della classe lavoratrice, di ogni livello politco.. oggi sarebbe forse un prete che lavora da amazon.. pero..abbiamo troppa teologia ..( che io stesso studio la sera nel mio piccolo per sconfiggere la mia ignoranza) Insomma la verita quale e"?
Margaret Herdersion 26.09.2023 I found the article about learning from other churches very helpful because it reminded me that in dialogue it is very important to listen to what the other person is saying. This is extra relevant to me at the moment because I’m trying to set up a new night shelter for destitute asylum seekers and a highly intelligent, very articulate person is publicly opposing me. I’m now not really angry with her because I have tried calmly to listen to her arguments and understand them - but it doesn’t mean I AGREE with what she says!