Siempre ha habido en la historia personas y grupos humanos que han hecho advocacy, incluso antes de que la palabra se registrara por primera vez en el idioma inglés en el siglo XIII. Para la justicia social podemos remontarnos al profeta Amós como para la naturaleza a San Francisco. De hecho, los pigmeos siempre han sido los cuidadores de la selva, sus verdaderos defensores. En el pasado, sin ser plenamente conscientes de ello, pero no hoy en día cuando su mundo va camino de desaparecer, al igual que el ecosistema que siempre ha sido su hogar: la selva.
Messok Dja, un área de la selva tropical del Congo especialmente rica en biodiversidad, es la tierra ancestral del pueblo Baka que ha manejado el bosque desde tiempos inmemoriales. Los Baka son uno de los muchos grupos pigmeos que viven en la selva que se extiende desde la Cadena del Congo-Nilo hasta el Océano Atlántico. Se les llama los pigmeos africanos, los cazadores-recolectores de la selva tropical africana o la gente del bosque de África Central. Los científicos los identifican aproximadamente en tres grupos geográficos principales: los Bambenga de la selva occidental, los Bambuti de la zona oriental y los Batwa de la zona central y meridional.
El de los pigmeos es un mundo fascinante. Ellos viven de la caza y la pesca, son recolectores seminómadas. Siempre han vivido en su propio mundo y felices de estar allí. Llegó la modernidad y contaminó, desgarró sus tradiciones. Los bantús los tratan como parias; los explotan como bestias, sin ningún derecho ni dignidad. Ahora las enfermedades de la modernidad, virus y bacterias del mundo exterior que sus mayores no conocían, acechan su vida.
Las carreteras, como serpientes de tierra roja ingresan a la selva casi con arrogancia, la misma arrogancia de los pobladores hacia la población Pigmea, cada vez más acosada, discriminada y despreciada a lo largo de los países donde viven. Sin embargo, según la UNESCO, los Aka, también llamados Bayaka, y todos los demás grupos Pigmeos son los primeros habitantes de la selva tropical que se extiende en casi ocho países desde las Montañas del Congo-Nilo del hasta el Océano Atlántico. Aun así, los Pigmeos son los más pobres de los pobres en estos países que los entre los menos desarrollados.
Mientras pretende establecer una zona de conservación en su tierra sin su consentimiento, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) amenaza a los Baka. Los guarda-parques cometen atrocidades violentas contra ellos, agrediendo, robando y asesinando personas en nombre de la “conservación de la naturaleza”. Hay guardabosques armados patrullando el área a pesar de que el parque aún no está establecido. WWF ha sido consciente de esto durante muchos años, pero ha hecho poco para abordar el problema. De hecho, las corporaciones madereras y de aceite de palma, entre otras, financian el proyecto de WWF.
Los devastadores resultados de una importante investigación que acaba de publicarse documentan graves violaciones de los derechos humanos y atrocidades cometidas contra el pueblo indígena Batwa en el Parque Nacional Kahuzi-Biega (PNKB), en el este de la República Democrática del Congo (RDC). El informe de Grupos de Derechos de la Minoría (Minority Rights Group - MRG), con sede en Londres, publicado el 6 de abril de 2022, muestra que las autoridades del parque se han involucrado en un programa de tres años de expulsiones forzadas y violentas (lea el informe aquí)
Los pigmeos tienen una íntima conexión con la selva, donde viven desde tiempos inmemoriales. También dependen de la selva para obtener medicinas, alimentos y refugio, y tienen sus propios códigos sofisticados de conservación. La selva es su vida. Quitarles la selva significa impedirles que se alimenten y condenarlos a la muerte. Por tanto, son instintivamente los cuidadores de la selva no porque fueran los buenos salvajes imaginados por J.J. Rousseau sino porque protegiendo a la selva abogan por sí mismos.
Un pigmeo se lo señaló a un guarda-bosques de la Reserva de Vida Silvestre Okapi de la selva del Ituri. El guardabosque le prohibía cazar allí “porque vas a matar el Okapi por carne”. El pigmeo respondió: “Para nada, la carne de Okapi no es buena, comemos monos”. En realidad, quien atacó a los guardabosques el viernes 14 de julio de 2017 matando a cuatro de ellos porque impedían la caza en el parque fue un grupo rebelde local armado, no los Pigmeos.
El derecho internacional dice que cualquier proyecto que se quiera iniciar en tierras tribales solo puede llevarse a cabo con el acuerdo de las personas a las que perteneces esas tierras. El proyecto Messok Dja ha violado esta ley, al igual que la Reserva de Vida Silvestre Okapi: estos proyectos no obtuvieron el consentimiento libre, previo e informado de las comunidades locales antes de que comenzaran el proceso de creación de los parques. La selva ahora está fuera del alcance de la tribu Baka como lo es para el grupo Bambuti. Si intentan ir allí, los guardabosques los detienen.
Al igual que los indígenas de la Selva Amazónica, los Pigmeos son los mejores cuidadores de la selva Africana. En América Latina, la REPAM (Red Eclesial Panamazónica) fue creada en 2014 respondiendo a las preocupaciones del Papa Francisco y de la Iglesia Latinoamericana sobre las “profundas heridas que llevan la Amazonía y sus pueblos”. Encarna la “opción de todo corazón por la defensa de la vida, la defensa de la tierra y la defensa de las culturas” según Papa Francisco. Los esfuerzos de REPAM produjeron un evento principal, el Sínodo Amazónico.
Recientemente, en marzo de 2015, las Conferencias Episcopales de África y Madagascar (SECAM) lanzaron la REBAC (Red Eclesial de la Cuenca del Río Congo), cuya misión es llevar a cada habitante de la cuenca del Congo, especialmente a los jóvenes, a apropiarse de las cuestiones del medio ambiente y cambio climático, así como de la visión de REBAC. Esta visión y esperanza es que “norte-sur, pueblos indígenas y comunidades locales, presentes y futuras generaciones tengan acceso a una vida de mejor calidad a través del manejo responsable y sostenible de los recursos naturales y en especial los recursos energéticos, pesqueros, biológicos, forestales y animales disponibles”.
Abogamos, esperamos y empujamos a que REBAC, al igual que REPAM para los pueblos indígenas, preste especial atención a los Pigmeos Centroafricanos.
Vea también: Atrocities prompt US authorities to halt funding to WWF, WCS in major blow to conservation industry (Las atrocidades incitan a las autoridades de EE. UU. a detener la financiación de WWF y WCS en un gran golpe para la industria de la conservación).
EU suspends funding to WWF’s flagship African project after persistent abuses. Damning UN investigation condemns WWF flagship project in Congo, reveals massive scale of abuses
(La UE suspende la financiación del proyecto africano insignia de WWF después de abusos persistentes. Una investigación condenatoria de la ONU condena el proyecto insignia de WWF en el Congo y revela una escala masiva de abusos). Vea más en: Pigmei, gli ultimi custodi della foresta (Pigmeos, los últimos guardianes del bosque) con espléndidas fotos de Bruno Zanzottera y Marco Trovato.
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