El estado de gracia habría durado tres años para Félix Tshisekedi. Realizado en diciembre de 2021, el nuevo sondeo del Bureau d'études, de recherche et de consulting international (Berci), con el Groupe d'étude sur le Congo (GEC) y Ebuteli, su socio de investigación en la RDC, registra el índice de popularidad más bajo del jefe de Estado congoleño desde su llegada al poder en 2019.
Menos del 30% de los congoleños encuestados dicen tener una buena opinión del Presidente de la República. Publicado el jueves 24 de marzo por estas tres organizaciones, el informe "Tercer año de Tshisekedi: ¿el fin del estado de gracia?" revela la desconfianza popular en los representantes políticos, tanto del gobierno como de la oposición. La caída del índice de popularidad del presidente Tshisekedi no ha, de hecho, beneficiado a sus posibles competidores en vistas a las próximas elecciones presidenciales, previstas para finales de 2023.
Esta decepción se extiende también a casi todas las instituciones del país. Casi un año después de su toma de posesión, el gobierno de Jean-Michel Sama Lukonde ha perdido un 20% de opiniones favorables. En cuanto a la Asamblea Nacional, "nuestra encuesta muestra una tendencia preocupante en la percepción del control del ejecutivo por parte del legislativo: más del 65% de los encuestados cree que el control del gobierno por parte de los diputados nacionales es "nada efectivo" o "inexistente". Esta tendencia pone en tela de juicio la capacidad de la cámara baja para desempeñar plenamente su papel de contrapeso al ejecutivo", afirma Joshua Walker, director del programa GEC. Incluso las confesiones religiosas han experimentado un ligero enfriamiento de su apoyo entre el público. Los socios extranjeros tampoco son inmunes a esta tendencia.
Esta decepción podría justificarse por la lentitud de las reformas. Sólo el 45% de los congoleños entrevistados en diciembre de 2021 creen que el estado de sitio en Ituri y Kivu Norte es algo positivo, frente al 63% de tres meses antes. Además, la lucha contra la corrupción, otro leitmotiv del Gobierno, tiene dificultades para convencer a la población de su eficacia, aunque Jules Alingete, Inspector General de Hacienda - Jefe de Departamento, sigue siendo más popular que cualquier otro miembro del Ejecutivo. "Ha sido muy visible desde el mandato de Tshisekedi, con varias salidas a los medios de comunicación. Pero muchos congoleños siguen considerando que la situación de la gobernanza y la lucha contra la corrupción no han mejorado. Las sanciones parecen ser simbólicas en lugar de un esfuerzo constante y exhaustivo de lucha contra la corrupción", afirma Fred Bauma, secretario ejecutivo de Ebuteli.
De hecho, se ha producido un gran aumento de la indecisión. Mientras que en marzo de 2021 sólo el 4% de los congoleños encuestados decía no tener una opinión sobre el Presidente Tshisekedi, ahora el 28,4% se muestra indeciso sobre la cuestión. Esto podría explicarse, entre otras cosas, por la ausencia de una alternativa política visible. El número de posibles abstencionistas para las elecciones presidenciales de 2023 también sigue siendo preocupante: sólo el 43,6% de los congoleños encuestados dice tener intención de votar.
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